¡Concéntrate en la correa, que te va a empacar!
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El flejado se utiliza habitualmente en el sector de la logística y el transporte de mercancías. Pero no sólo eso.
Embalaje y manipulación, centrado en el flejado
El flejado se utiliza habitualmente en el sector de la logística y el transporte de mercancías. Pero no sólo eso. Muchos profesionales utilizan este material, que es a la vez fuerte y fácil de manejar, cuando se trata de embalar, asegurar y enviar uno o varios palés de productos.
¿Qué es el flejado?
El flejado se utiliza para cerrar de forma segura los paquetes, para flejar la mercancía empaquetada y para asegurar todos los paquetes en el palé. Su carga está segura, sin riesgo de dañar el contenido de su envío. El fleje es especialmente resistente y conserva sus propiedades incluso cuando se almacena en condiciones extremas o en el exterior.
Los diferentes tipos de flejes
Hay varios tipos de fleje: fleje textil, fleje de plástico, fleje de poliéster hilo a hilo y fleje de acero. Cada material ofrece diferentes niveles de resistencia y vida útil para adaptarse a sus necesidades y aplicaciones profesionales. En función de la carga de sus palets, puede elegir uno u otro fleje: el fleje metálico o de acero se utiliza principalmente para envíos duros y pesados.
Centrarse en el flejado de cable a cable
Las bobinas de hilo a hilo están disponibles en 3 variaciones diferentes: 13 mm x 1100 m, 19 mm x 600 ml y 16 mm x 850 ml. Elija el que se adapte a sus necesidades.
A diferencia de los flejes de alambre trenzado, los flejes de alambre a alambre se fabrican juntando los alambres y uniéndolos en paralelo por inducción de fusión en caliente.
Características, usos y ventajas de los flejes de malla metálica
Ideal para asegurar cargas pesadas, el fleje de poliéster hilo a hilo ofrece una gran resistencia a la tracción.
No cortante, flexible y ultrarresistente, este fleje puede utilizarse tanto manualmente como en carrete, con bucles de acero autobloqueantes o con tensor de fleje.
Es resistente a la putrefacción y puede soportar las condiciones de almacenamiento más extremas sin deteriorarse, incluso en el exterior.